Además de ser algo incómodo, estéticamente no es nada favorecedor, por eso debemos prestarles una serie de cuidados para mantenerlos siempre perfectos.
Uno de los pasos más importantes es la exfoliación. Al igual que eliminamos las células muertas de nuestro cuerpo, debemos hacerlo igualmente con nuestros labios para devolverles la suavidad que necesitan.
El exfoliante que normalmente utilizamos para el rostro, a veces puede ser demasiado abrasivo para nuestra boca, es por eso que en ocasiones es recomendable utilizar productos más naturales para cuidar nuestros labios.
Miel y azúcar para tus labios
Podemos fabricar nuestro propio exfoliante casero a base de azúcar y miel. En un recipiente mezcla una cucharadita de azúcar con una de miel. Cuando la mezcla esté preparada, aplícalo con el dedo y masajea con mucho cuidado los labios. Cuando termines acláralos con agua tibia.
Una vez terminado este paso, deberás darles un extra de hidratación. Puedes aplicarte un poco de aceite de oliva como si de vaselina se tratara. Déjalo actuar durante aproximadamente una hora. Notarás tus labios mucho más sedosos.
Si tienes muchos 'pellejitos' lo mejor es que realices esta exfoliación tres veces a la semana a modo de rutina para que puedas olvidarte completamente de los restos de piel muerta y la sequedad que de vez en cuando sufren nuestros labios. Recuerda además que la hidratación diaria es muy importante.
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